La exdelegada de Hacienda cuenta cómo fue su paso por la política
Asunción Fley Godoy es una mujer que lleva 30 años en la función pública, y que además formó parte del equipo de Juan Ignacio Zoido durante su mandato como Alcalde de Sevilla de 2011 a 2015. Como delegada de Hacienda y Administración Pública, habla de un ayuntamiento lleno de ‘agujeros’, que tuvieron que sanear y reconstruir. Entiende que la política es vocacional desde el punto de vista de que es un servicio público, y afirma que entendida de ese modo, sí le gusta.
Estudió derecho en la Universidad de Sevilla, y accedió a la función pública por oposición en el año 1987; oposiciones que por cierto, apunta siguen siendo igual de justas ahora que entonces, pues según ella "solo aprueba el que está bien preparado". Dedicada por completo a la función pública, Fley accedió al cargo político por mera casualidad. Y es que un día, Juan Ignacio Zoido, al que conoció muchos años atrás, la llamó para tomar un café; ella pensó que querría interesarte por algún tema relacionado con el ayuntamiento y cual fue su sorpresa cuando Zoido le contó sus intenciones, su proyecto y su propuesta. "Me lo contó y a mí me fascinó, sobre todo por el reto que suponía para mí, y le dije que sí. Después ganamos las elecciones, me había metido en las listas y me nombró Delegada de Hacienda y Administración Pública", cuenta Fley.
Cuando le preguntan por el mayor logro que ha conseguido el Ayuntamiento durante el mandato de Zoido, Asunción no tiene duda de que fue el hecho de rescatar un Ayuntamiento lleno de deudas, que no pagaba a los proveedores, y hallar la fórmula de reorganzarlo todo desde dentro, para que con lo mismo, se pudiera hacer más. "Disminuimos en más de la mitad los préstamos y conseguimos que el plazo de pago a los proveedores bajara de 30 días", dice la ex-Delegada. Por otra parte, también asume que el mayor fallo quizá fuera la falta de tiempo dedicado a la comunicación con la ciudadanía; se prefería invertir todo el tiempo en trabajar, pensando que más adelante podrían permitirse el hecho de trasladar todo lo que se estaba haciendo al ciudadano, pero cuando se dieron cuenta llegaba el final de un mandato lleno de trabajo que apenas les dejó tiempo para más.
Fley opina que la situción de la mujer en política no está infravalorada, y que quizá en empresas privadas sea mucho mayor el desnivel entre hombres y mujeres respecto a salarios y puestos de trabajo. Ella se ha sentido muy bien durante los años que ha sido parte del grupo de Zoido, y lo mismo cuando volvió a la función pública. "Para mí ha sido la sensación de volver a casa. Son personas con las que he convivido 30 años, más que con mis hijos incluso, y han sido un apoyo tanto en lo profesional como en mi vida personal".
Y hablando del actual gobierno, la ex-delegada dice estar preocupada por la situación económica sobre todo la falta de pago a los proveedores. "Creo qye ahora mismo vana remolque, o a la deriva de lo que dejamos nosotros y de lo que conseguimos. Tampoco veo las ayudas sociales que había antes, y eso me preocupa." Fley habla de la política convencida de que es vocacional, y de que hay muchos políticos con vocación, más de lo que la ciudadanía cree. A la pregunta de si volvería a participar en política, Asunción contesta que seguramente sí, porque sería difícil rechazar algo que le supusiera un reto. Además, tras muchos años prestando un servicio público, ella entiende la política como un tipo de servicio más, y entendida así, sí le gusta.