
Rafa Vega es profesor de Periodismo en el Centro Universitario EUSA y también es docente en el Council of International Educational Exchange (CIEE) desde el pasado año. Periodista en activo y apasionado de su profesión, lo tuvo claro desde pequeño. Él quería contar historias y compartirlas con el mundo. Considera que “los periodistas tenemos la suerte de ver muchos acontecimientos desde la primera línea y al final se trata de no quedártelo para ti y compartirlo con el resto de la gente”.
El deporte y la ciudad de Nueva York son dos constantes en su vida. Durante prácticamente la totalidad de su trayectoria profesional, Rafa ha cubierto eventos de carácter deportivo. Y, desde hace 12 años, participa en el evento que llena de runners la Gran Manzana cada año el primer domingo del mes de noviembre. De hecho, en su página web dedica una sección a su pasión por correr y, además, ya ha escrito varios libros relacionados con el tema.
Pero en la vida nunca hay que cerrarle las puertas a nada. Por eso, hace 3 años decidió dar un giro de 180º y se adentró de lleno en el periodismo político. “No tenía ninguna experiencia ni bagaje, pero fue una oportunidad para seguir aprendiendo y avanzando. Llega un momento en el que tienes la oportunidad de llevar tu carrera hacia otro sitio y ahí es donde estamos ahora”, afirma. Rafa también explica que trabajar en un medio de comunicación implica un constante ejercicio de aprendizaje y crecimiento, ya que la formación es un aspecto clave.
En la misma línea, defiende la importancia de abrirse a la tecnología y valerse de las nuevas herramientas que existen para generar contenido. “Las redes sociales son una ventana que nosotros podemos abrir al mundo”, señala. Para Rafa, haberlas incorporado a sus rutinas de trabajo le ha permitido, por una parte, aprender. Porque, como explica “las redes sociales tienen unas narrativas, un storytelling y un lenguaje completamente distinto”. Pero además, considera que existen otro tipos de públicos muy concretos a los que se puede llegar con ellas y eso es lo que marca la diferencia con los tradicionales medios de difusión.
En estos tiempos, Rafa señala que no hay que ponerse ni límites ni barreras. “Ahora mismo, con un teléfono móvil, con un micrófono o con las redes sociales se puede llegar a la gente porque son un altavoz magnífico para llegar a 10 personas o para llegar a 1.000.000”, apunta. Y considera que para poder aprovechar las opciones disponibles, es necesario conocer los recursos y las herramientas tecnológicas que están a nuestro alcance.

Estudiante de Periodismo, apasionada de los viajes y amante de las buenas historias