Opinión: O lo amas, o lo odias

A las televisiones de los más curiosos ha llegado de la mano de Telecinco y con Mónica Naranjo como presentadora, La Isla de las Tentaciones, un programa en el que cinco parejas en crisis se trasladan hasta un territorio idílico donde conocerán la fortaleza de su relación. Estas parejas serán separadas por género en dos casas y tendrán que vivir con un grupo de solteros y solteras que pondrán a prueba su fidelidad de continuo.
Tal está siendo el éxito del nuevo tvshow de Telecinco y Cuatro que se augura, por parte de Mediaset, la renovación para la segunda temporada.
Cierto es que programas de entretenimiento como este, suscitan tantas opiniones como personas que la expresan, por eso, Eusa News ha salido a la calle para conocer el parecer de los jóvenes españoles.
“Me parece una manera muy fea de entender las relaciones por parte de los jóvenes de hoy en día y la definición de los valores de pareja como el respeto o la comprensión. Si eso es un reflejo de la sociedad actual y la venidera, vamos muy mal encaminados. El hecho de que las relaciones de las personas que participan en el programa sean nefastas, considero que viene dado por la falta de confianza en sí mismos y en su parejas que tienen todos y todas.” Judith, Periodista, 23 años
“Lo considero una falta de respeto para el ser humano. Tan sólo he visto el anuncio y me parece penoso. No sé qué ejemplo quieren dar a la sociedad sobre lo que es tener una relación, respeto y dignidad. Sólo espero que no consigan confundir a muchos jóvenes con este tipo de programas.” Mª Carmen, abogada, 25 años
“Es el típico programa de Mediaset con viceversos y grandes hermanos que muestran las desgracias ajenas. ¿El problema? Engancha. Lo más curioso es como las mujeres, a pesar de pensar lo contrario, son las primeras en caer en las tentaciones. Y lo segundo es ver como todas y todos se excusan y escudan en el comportamiento de los demás para poder ligar y ser infieles sin sentirse culpables. Sea como sea, te hace pegarte a la pantalla y, en ocasiones, sentir vergüenza ajena.” Fabiola, filosofía, 29 años
“Es un espacio donde se denigra por completo la figura tanto del hombre como de la mujer con las actitudes que se desempeñan en las casas. Cada persona busca la fama fácil y ser infiel a su pareja de una manera “justificada”. Verdaderamente se ve quien sí o no está enamorado o respeta a su pareja.” Cristóbal, bailaor flamenco, 18 años
“Como estudiante de periodismo y comunicación audiovisual no puedo permitirme el lujo de desconocer los programas que se emiten en la televisión, pues el día de mañana es lo que me va a dar de comer. Como todo individuo tengo gustos personales, algunas cadenas son más de mi devoción y otras las veo porque, como he dicho antes, no puedo permitirme dejar de verlas. Bajo esta premisa me gustaría decir que no somos más que nadie por ver unas cadenas de televisión u otras, un programa no es mejor que otro, cada cual tiene su objetivo y su público y mientras exista el respeto a cualquier telespectador que se pueda topar con cualquier programa es válido. Ya ves tú el daño que hace una telepitonisa a las 3 de la mañana. Deberíamos mirar más por si, en el día a día hacemos algo por los demás, nos sentimos bien moralmente y criticar menos los gustos personales de cada persona. Aunque hay programas con mayor calidad informativa que otro, debe haber para todo tipo de personas y ahí es donde radica la riqueza de nuestra sociedad. Viva la libertad. También hay que entender que los realitys tienen un guion detrás.” Cristina, estudiante de Periodismo y CAV, 23 años
“Soy contrario, no sólo a los programas de este tipo, sino a toda la parrilla televisiva de Mediaset. Por mi profesión, trabajo con muchas personas que viven de su imagen y, la mayoría de ellos, han saltado a la fama porque su única aspiración es esa, la de vivir de su físico e ir yendo de programa en programa. Estos espacios y los similares a él como Hombres, Mujeres y Viceversa o Gran Hermano, han creado un modelo de vida en algunos jóvenes y no tanto, que no es otro que el de enseñar a personas que no quieren luchar por un futuro a necesitar tan sólo cara dura y dejar por los suelos su integridad moral para vivir del cuento e ir encadenando un programa tras otro para poder tener todos los privilegios sin costeárselo con el sudor de su frente.” Pablo, DJ, 32 años

Gaditana de conocimiento, nacimiento y corazón, en el año del estreno de Friends. Descubriendo la pasión por el periodismo y mi sitio en él dando pasos de plomo.