Ni chico ni chica, Max es no binario

A las primeras personas que Max (nombre ficticio) le contó que pertenecía al género no binario reaccionaron, la mayoría, faltándole el respeto. “Una incluso como estudiaba biología empezó a decirme que como ella había estudiado Biología sabía que eso era mentira y que eso no era posible”, comentaba indignado.
Max tiene veinte años y estudia Animación 3D y Videojuego. En su casa, su familia aún no lo sabe pero es no binario, un término que está fuera de las clasificaciones de lo masculino y de lo femenino. Es decir, una persona que no se identifica ni como hombre pero tampoco como mujer. “El género no binario es como un abanico. Hay personas que quieren especificar en qué parte del abanico están; si se acercan más a chicas, si se acercan más a chicos, si son un género totalmente diferente , si están justo en el medio… Yo me lo imagino como un cuadro de colorines donde en un punto está chico, en otro chica, en otro género y en otro sin ningún género. También ser agénero es ser parte del género no binario”, explica.
El uso de la -e
Cuando Max pide que se refieran a él en masculino, las personas cisgénero (CIS) son las que siempre le cuestionan. “Me preguntan, me hacen sentir incómodo, me obligan a darles explicaciones de horas para que después ni siquiera se tomen la mínima educación y respeto para llamarme precisamente por los pronombres de lo que yo me he esforzado en explicarle tres horas”, comenta. Según Mundodiario, las personas CIS son aquellas cuya identidad de género coincide con el sexo que le asignaron al nacer.
“El hecho de que hable en masculino no significa que yo me quiera poner pene. Eso no tiene nada que ver. Es más el hecho de que me llame en masculino ni siquiera significa que sea un chico ni que sea no binario. A lo mejor soy una chica pero me gusta verme masculino porque esa es mi expresión de género. Es la forma que yo tengo de expresar una parte mía”, argumenta.”En mi casa también me llamo de él desde hace ya un año pero aún así mis padres me siguen llamando de ella. Es como que hacen oídos sordos”, sigue explicando.
Él no usa la -e para referirse a sí mismo porque piensa que es más neutro hablar en masculino. Sin embargo, en la sociedad actual es todavía complicado y “choca” muchas veces utilizar la -e. “A mí también me choca bastante y me da mucha vergüenza. Ya me da suficiente vergüenza decir que me llamen de él. O tener que explicar que soy no binario. Y miedo porque también paso miedo de la reacción que vaya a tener esa persona como para encima decirles algo que es ya totalmente loquísimo. Igualmente como a mí tampoco me suena del todo bien, tampoco he intentado usarlo pero porque no me ha llamado suficiente la atención. A mí me llama un poco más la atención que me llamen de él en España. Si sonara más normal en español el género neutro… pues lo mismo lo usaría. Por eso en inglés lo uso porque en inglés si me gusta como suena.” explica.
La ropa
En cuanto a la ropa, a Max también le resulta complicado y a veces hasta incómodo elegir que ropa se va a poner al comenzar el día, ya que la ropa también está clasificada entre lo masculino y lo femenino. “El problema de la ropa es que si yo le digo a todo el mundo que me hablen en masculino pero en el momento en que ven una fracción mía mínimamente femenina es como que verán que flaqueo, y entonces ya automáticamente se creerán que tienen el permiso de llamarme en femenino. Ah vale, ahora es una chica. Me siento muy presionado en ese aspecto porque, ¿sabes? a mí me gustan los vestidos y me gustan las faldas. Yo tengo faldas y vestidos que me gustan y muchas veces no me las pongo por eso.”

Gateando aún en el mundo del periodismo. Empecé en una radio local en Sevilla llamada Onda Capital, en un programa musical. Sigo colaborando con esta radio en entrevistas puntuales. He aprendido, gracias a Pepe Barahona y Fernando Ruso tras ofrecerme una beca con ellos, el periodismo de investigación más puro, del cual me he acabado enamorando. Actualmente estoy realizando unas prácticas en Abc de Sevilla, un periódico que me permite seguir dando mis pasos en esta profesión.