¿Quién es David Villafañe?

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VIZCAYA, 1995.

Jorge de diecinueve años, estudiante de económicas y de familia acomodada conoce a Marta Couceiro, 17 años. Se enamoran y comienzan una relación en el verano de ese mismo año aproximadamente.

Este joven se ganó rápidamente a Marta y a sus padres. La relación se afianzó bastante pronto e incluso consiguió que Marta se emancipara. Casualmente éste era un requisito de la compañía de seguros para poder ser contratada en la empresa del padre de su novio. Pero resulta que Jorge se llama David Villafañe y su padre era taxista, por lo que tener un seguro de vida a esa edad da un poco que pensar. Justo cuando Marta se va de casa, David ya había contactado con más de siete aseguradoras para crear el tan ansiado seguro de vida de la joven: en él, su novio aparecía como único beneficiario y como anticipo se quedó, el condenado por estafa, con la tarjeta que tenía un crédito diario de 5000 pts.

Desde que este chico llegó a la vida de Marta su actitud había cambiado. Este cambio llegó a tal punto que sus amigas se dieron cuenta y tuvo que confesarles que a David le gustaba un juego muy peculiar y es que le apretaba el cuello con fuerza hasta dejarla inconsciente, y es que en ocasiones llegaba con los ojos que parecían inyectados en sangre. Esto no evitó que poco tiempo después, el 20 de septiembre de ese mismo año, Marta contara a sus amigas que se iba a vivir con su novio a Madrid aunque tres días más tarde acabaron en la casa de verano de los padres de la menor, en Górliz.

Marta fue encontrada muerta el día 25 de octubre de ese mismo año. Tras hacerle una primera autopsia, por el forense Alberto Garay Azcona, ésta determina que ha sido una muerte súbita.

Unos días más tarde, la familia conoce toda la trama de las compañías de seguros y el Juzgado de instrucción número 2 de Guecho emite una orden judicial para exhumar el cuerpo de Marta. La segunda autopsia se realiza el 29 de noviembre bajo las manos de Francisco Etxebarría Gabilondo, María Castellanos Arroyo y el primer forense que le realizó la primera autopsia; ésta revela que hay unos claros síntomas por sofocación. Después de una exhaustiva investigación, en 1998, la Audiencia Provincial de Vizcaya condenó a David Villafañe a 19 años de prisiónpor sofocación homicida y estafa continuada. Ya tenía antecedentes de una compañía de seguros en la que había trabajado que le acusaban de haberse llevado dinero de la compañía y que también consta en la sentencia de 1998.  Más tarde el Alto Tribunal, ratificó la condena.

David recuperó la libertad el 29 de Enero de 2017. Cumplió 19 años y medio de condena rechazando los beneficios que le hubieran permitido disfrutar de salidas  desde el año 2013 pero nunca ha querido admitir su culpabilidad.

Y ahora, este caso vuelve a la actualidad por esto mismo, porque a pesar de haber cumplido totalmente su condena sigue peleando por demostrar, según él, que es inocente.

Ha acudido al programa de Susanna Griso, Espejo Público, para contar su lucha, la que mantiene desde sus inicios, llegando a realizar tres huelgas de hambre que casi acaban con su vida para mostrar su desacuerdo con la condena que le incrimina. Además, le ha encargado al catedrático de Medicina Legal Luis Frontela, el estudio de las dos autopsias de Marta Couceiro Gómez, y este prestigioso forense ha llegado a la conclusión de que la joven murió por una dolencia cardíaca: miocarditis. Esto es un dato que ya se anotó en la segunda autopsia del Instituto Nacional de Toxicología en 1995 pero que no tuvo mayor relevancia que la causa real, según los forenses, de la muerte.

En su entrevista, intenta convencer a la opinión pública de su inocencia alegando que “la ciencia me respalda acreditando que se hizo un estudio incompleto de Marta”, además de señalar que la sociedad “está en deuda con él” por haber cumplido una condena injusta, “querían incriminarme y falsificaron la autopsia”.

Las declaraciones habían sido muy contundentes hasta que, inesperadamente, Alfonso Egea, colaborador del programa de Antena 3, recibe una llamada de la hermana de la chica fallecida. Al borde de un ataque de nervios aseguraba que “fue él quien mató a su hermana porque Marta no tenía ningún problema de corazón”. También ha pedido que dejen este tema aparte que les hace daño pues, “mi hermana está bajo tierra y este hombre en la calle”.

Veremos a qué conclusión llegan nuevamente los tribunales y por otro lado, la familia de Marta, que pide respeto absoluto con el tema, también se plantean hacer alguna aparición pública con las pruebas que guardan desde hace años y que están dispuestos a sacar a la luz.

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