OPINIÓN: Las siete vidas de Zidane

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Cuando hablamos de gatos en Madrid no debe sonar raro para nadie. Gato es el gentilicio que se le asigna a la persona castiza, nacida y criada en Madrid. Gato es como Mourinho llamó a Karim Benzema para referirse a su actitud dentro del campo en una famosa rueda de prensa. Y gato, que no lo es pero también es francés, es lo que parece Zinedine Zidane ahora mismo en el Real Madrid. Ya que por mucho que lo maten, sigue en el banquillo blanco. Como si tuviera siete vidas. Como si fuera un gato.

Y es que la sombra de las dos Champions consecutivas es muy alargada en la capital. El palmarés que ha acumulado Zidane en sus dos años en el Real Madrid es envidiable: Dos copas de Europa, una Liga, dos supercopas y dos Mundialitos. Siete títulos como siete vidas que lo siguen manteniendo al frente del barco llamado Real Madrid. Porque si no, no se entiende. El Madrid vive una de sus mayores crisis futbolísticas de los últimos diez años. Desde la temporada 07/08 no había tanta distancia entre el líder y el Real Madrid.

El equipo salió sonrojante de su cita con el clásico con un aplastante 3-0 en el Camp Nou. De Wembley, también se llevó de regalo otros 3 goles que le relegaron a la segunda plaza del grupo que conllevó a verse con el PSG en octavos de Champions. El Real Madrid está en octavos de copa con una ventaja de 3-0 sobre el Numancia, con dos goles de penalti. También dos goles de penalti le llevaron a estar contra el Numancia, ya que el Fuenlabrada, equipo de 2ªB, le remontó la eliminatoria en el Bernabeú. Ese es el nivel del Real Madrid ahora mismo. El nivel de que cualquiera puede marcar y ganar al campeón de Europa.

16 puntos bajo el Barcelona no es lo más preocupante, lo preocupante es que el Sevilla, quinto en la tabla, está 3 puntos por debajo de los merengues, mientras que el Valencia está 5 puntos por encima. Más cerca de la Europa League que de la Champions, eso es lo alarmante. Pero en el Madrid no hay alarma. La "Felizidane" continúa en el vestuario, sin autocrítica, sin soluciones. Sólo sonrisas en ruedas de prensa y firmes defensas de aficionados que recuerdan tiempos pasados: "¡Y todo lo que nos ha dado!", exclaman. Como si el fútbol no cambiara en un segundo, como si no se asumiera que lo que antes funcionaba, ahora ha caducado.

Los argumentos en contra son sólidos, pero el palmarés actúa como salvavidas de este nuevo gato de Madrid. Y señor Florentino, yo le diría antes de que fuese demasiado tarde: Déjese de gatos, y apriete el gatillo.

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