Más allá del título: La historia no contada de las campeonas del mundo
Jenni Hermoso, Irene Paredes y las dobles ganadoras del Balón de Oro, Alexia Putellas y Aitana Bonmatí, entre otras, narran los problemas que llevaron a 15 jugadoras a renunciar a la selección española. Estas deportistas no estaban de acuerdo con la manera en que la federación gestionaba el fútbol femenino y creían que la continuidad de Jorge Vilda como seleccionador no contribuía al crecimiento del equipo.
Además, explican por qué algunas decidieron regresar a la selección y, finalmente, convertirse en campeonas del mundo. También comentan todo lo que sucedió detrás del beso de Luis Rubiales a Jenni Hermoso, un hecho que llevó a la dimisión de Rubiales, quien llevaba en el cargo como presidente desde 2018.
Irene Paredes, defensa del Fútbol Club Barcelona y una de las capitanas de la selección en la derrota en cuartos de final en la Eurocopa del 2022, decidió hablar con Rubiales para intentar cambiar la gestión de la federación. Su intención no era echar a Vilda, sino buscar soluciones que mejoraran las condiciones del equipo, especialmente en relación con los viajes para convocatorias.
Sin embargo, según las jugadoras, Rubiales tomó esto como un pulso y, supuestamente, hizo públicos los mensajes intercambiados. En la primera convocatoria posterior a la publicación de estos mensajes, Jorge Vilda reunió a las jugadoras, pero algunas de ellas decidieron no expresar lo que pensaban como equipo.
Después de esto, 15 jugadoras firmaron un comunicado en el que renunciaban a la selección hasta que no hubiera cambios en la federación. Con el Mundial de 2023 acercándose, una de las capitanas, Alexia Putellas, decidió hablar con Rubiales e intentar calmar la situación, proponiendo una serie de condiciones que debían cumplirse para que ellas pudieran ser seleccionadas nuevamente por el entrenador Jorge Vilda. Tras esto, algunas de ellas decidieron que querían volver a ser seleccionables para el equipo.
En Australia, España logró convertirse en campeona del mundo por primera vez en la historia del fútbol femenino. Sin embargo, este histórico logro quedó ensombrecido por un incidente en la celebración, donde todas las cámaras del mundo captaron al presidente de la federación besando a Jenni Hermoso. Este hecho generó presiones por parte de la federación para que la jugadora minimizara la situación y se dejara de cuestionar a Rubiales. Ante su negativa, él se vio obligado a dar una rueda de prensa, en la que culpó a Hermoso. Posteriormente, Alexia Putellas publicó un tuit en apoyo a su compañera, lo que desató una ola de apoyo de jugadores y jugadoras de todo el mundo bajo el hashtag #SeAcabó.
A pesar de toda la controversia generada, las jugadoras están satisfechas con lo que han logrado como equipo y selección. Además, se sienten orgullosas de haber mejorado las condiciones para las jugadoras en la selección y de haber contribuido a ofrecer referentes a las futuras generaciones.
Redactora de EUSA News en la sección de Actualidad.