Opinión: España ganó la Nations League ante una Cartuja desbordada

En la jornada del miércoles, la isla de la Cartuja quedó en un oasis incomprendido de vehículos aparcados en la carretera que une el Estadio Olímpico con el Aeropuerto. Los paneles luminosos que lucían las autovías de acceso a la ciudad, comunicaban el colapso que estaba sufriendo el entorno del estadio a una hora y media para que comenzara el partido.

Cuando este servidor se dispuso a entrar en el corazón de la Cartuja, una larga fila de coches intentaban acceder al recinto. Largas colas de espera, vehículos que apenan avanzaban, personas aparcando en plena carretera…y así un sinfín más de inconvenientes que se dieron durante la tarde. Y ojo, que el estadio estaba a la mitad de su capacidad. La Cartuja puede albergar a 60.000 espectadores. ¡Éramos 32.600!

Vista del estadio donde se aprecia grandes huecos en las gradas. // Fotografía Andrea Estevez

Esto da a entender que Sevilla aún no está preparada para acoger este tipo de celebraciones. Muchos de los paneles que anteriormente he mencionado, incitaban al uso del trasporte público. Un trasporte público por el cuál se sustenta en líneas de autobuses colapsadas de personas que querían ir hacia el estadio pero que debían esperar al siguiente autobús para volver a intentar la épica de montarse.

Desde mi punto de vista, a Sevilla le intentan vender que es la capital de Andalucía y del sur de Europa pero en infraestructuras la ciudad flaquea. ¿Cuál es la solución? ¿Vamos a tener que salir 3 horas antes de nuestros domicilios para aparcar medianamente normal y no en una carretera?

Varios sevillanos se quejaban de la situación por redes sociales como X.

Y recordemos que esta ciudad volverá a acoger las finales de Copa del Rey o el Mundial de Fútbol del 2030. Hace falta más transportes públicos para desbancar la idea de ir en vehículo propio a eventos de grandes aglomeraciones. Hace falta mucho más para Sevilla.

Juanma Baños

Periodista en Eusa News especializado en cofradías.