Pepe: “Y si, como decía Fischer, el ajedrez es encontrar la verdad”

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Hablamos con Pepe, jugador empedernido del ajedrez, compañero mío en el máster de filosofía y cu que aprovechaba cualquier instante para sacar su pequeño tablero imantado y jugar con quien supiera : y es que el ajedrez no es un juego o deporte fácil, de la sorpresa que me ha generado ver y hablar con Pepe sobre el ajedrez nace este breve reportaje sobre su relación con el ajedrez y si hubiera alguna vinculación con la filosofía.

“Jugando, desde pequeño, pero empecé a estudiarlo hace 4 años, antes de que se pusiera muy de moda. Sin embargo, no he estudiado todo lo que debería, voy y vengo del ajedrez”

1. ¿Cómo le explicarías a alguien en qué consiste el ajedrez?
Es el juego, ante todo, de la responsabilidad, no pierdes por mala suerte, pierdes
porque los dos rivales han ido construyendo una posición y el que ha perdido, ha
permitido que la posición del contrario sea superior.
Pero no sólo eso, el ajedrez es un juego irromplible, inquebrantable y que supera
al propio humano. El ajedrez moderno tiene unos 500 años de historia (tal y
como lo entendemos ahora), y nadie ha sido capaz de encontrar el secreto con el
que se puede romper el juego (al contrario de lo que sucede con el tres en raya
por ejemplo). El número de posibles partidas que se dan en las sesenta y cuatro
casillas es de 10 elevado a 100, superior al número de átomos en el universo
observable (10 elevado a 84 si no me falla la memoria).
Esto es inmenso, estamos hablando que un juego que tiene quinientos años de
historia, es más complejo que lo que podemos abarcar como naturaleza. Las
sesenta y cuatro casillas esconden posibilidades inimaginables que, como es
obvio, ni las propias máquinas saben jugar a la perfección, ya que no existe tanta
potencia de cálculo.
2. ¿Qué diferencia al ajedrez del resto de deportes?
En el ajedrez no hay mala suerte entendida como tal; podemos decir “que mala
suerte he tenido porque he entrado en una preparación casera del rival”, pero la
responsabilidad recae sobre el propio jugador, porque la preparación para la
partida que has traído es peor que la del rival.
3. ¿Qué virtudes hacen falta para jugar al ajedrez?
Para jugar al ajedrez, con saber mover las piezas y comprender más o menos los
temas tácticos se puede jugar decentemente. Pero hasta para eso es necesario un
cierto compromiso de estudio. Ahora bien, si queremos jugar bien una partida,
tenemos que haber estudiado muchísimo; Fischer, que era uno de los genios más
grandes de la historia, estudiaba doce horas diarias y tuvo que aprender a leer en
ruso para poder leer las revistas de ajedrez soviéticas. Por lo que, hace falta
mucho compromiso.
Ahora bien, a nivel amateur, solamente el disfrutar de evaluar una posición
comprendiendo cada detalle, puede ser suficiente recompensa para el jugador,
pero, incluso para eso, se necesita un compromiso para con la partida. Jugar con
una cierta coherencia, implica un compromiso, un esfuerzo para demostrar que
tu comprensión de la posición es superior a la del rival.
4. ¿Crees que el ajedrez define una personalidad concreta?
No, puedes encontrar estilos muy parecidos en dos jugadores que son
completamente diferentes. También es cierto que tendemos a simplificar el
juicio de lo ajeno cuando las personas nunca son fáciles, pero un ajedrecista de
ataque, dinámico y combinativo no necesariamente es extrovertido, por ejemplo.
De hecho, ni siquiera tengo por qué tener los mismos gustos con otros deportes;
en el fútbol, disfruto viendo partidos del Wimbledon de la Crazy Gun, o del
Granada de los setenta. Del primero, se decía que sólo se le puede seguir con el
teletexto a causa de la agresividad (para entendernos, una versión dura de lo que
hoy se llama anti fútbol). Sin embargo, en el ajedrez, me gusta ver posiciones
complejas y remates combinativos, que sería prácticamente opuesto.
Donde creo que sí que podríamos incidir es en el concepto de responsabilidad;
con esto no me refiero, ni mucho menos a que los jugadores de ajedrez no
cometan temeridades ni mucho menos, pero, como norma general creo que las
asumen (si es que el juego ha influido en los mismos).
5. ¿Qué es lo que prima en el ajedrez?
La profundidad. No sólo en cálculo, sino en comprensión de la posición. Hay
jugadas que una mente humana no puede calcular, pero se hacen por concepto,
porque comprendes que con esa jugada, aunque no puedas calcular el final de la
secuencia porque hay cientos de variantes dificilísimas de calcular.
Simplemente, comprendes que esa jugada (de una forma especulativa
normalmente) te da una ventaja.
Normalmente este tipo de jugadas se aprecian más en los sacrificios, de peón,
pieza, calidad, o, incluso en algunos casos, dama. Pero para hacerlos necesitas
tener una comprensión muy profunda de la posición. Digamos, por así decirlo,
que eres capaz de traducir lo que la posición te está diciendo.
6.¿Qué te hace ganar?
Puede haber varios factores, una buena preparación casera en la apertura (la cual
necesita horas y horas de estudio con el módulo delante) te puede hacer ganar
una ventaja. Sin embargo, las ventajas en aperturas (salvo en líneas en las que se
llegan a finales) son pasajeras, el secreto es saber mantener esa ventaja, por eso
no tiene mucho sentido que un amateur invierta mucho tiempo en estudiar
aperturas, porque lo que gana es la profundidad, el cálculo y la comprensión
posicional.
También es cierto que hay jugadores que no se sienten cómodos jugando con
poco espacio, mientras que otros están en su salsa, el jugar de forma que al rival
no le guste puede ser decisivo, pero, todo sea dicho, un jugador más o menos.
También habría que hablar del factor psicológico, pero no me lo creo tanto. Hay
gestos, tales como mover “al toque” que frustran al rival y no le dejan jugar al
nivel que se le espera, cabeza es un mundo, pero a priori, este último factor no
me lo creo tanto.
7. . ¿Cómo se perfecciona el juego?
Según a qué nivel. Lo que todo el mundo, y a cualquier nivel, debe de hacer, es
táctica, calcular y calcular, pero también estudiar los cientos de miles de
patrones que se dan en el ajedrez. Hace poco, unas de las hermanas Polgar (no
recuerdo cual) resolvió en Twitter un problema de ajedrez en muy poco tiempo,
al preguntarle la gente, ella argumentó que cualquier gran maestro reconocería
ese patrón, ya que los grandes maestros son capaces de reconocer más de diez
mil patrones.
Ahora bien, los finales es algo en lo que, reconozco que yo mismo nunca he
entrado, y es completamente necesario, hay cientos de tipos de finales que te
debes de saber y que es lo que hace que un amateur pase a ser medianamente
competitivo (por eso, y por otras muchas cosas, nunca lo fui).
En tanto a apertura, nunca está de más tener un buen repertorio de aperturas y
conocer bastante de teoría de apertura para, más o menos, solventar los posibles
problemas que te puedes encontrar si te sorprenden al empezar una partida, tales
como jugadas que están refutadas, o las jugadas que se conocen como celadas.
8. ¿Qué tiene el ajedrez que lo hace tan especial?
Puedes jugar con cualquier persona del mundo, de cualquier edad, sin poder
entenderte con ella, y aun así, las sesenta y cuatro casillas ponen de manifiesto
una especie de lenguaje con el que te comprendes, pero imagino que esto se dirá
de todos los deportes.
Lo que quizá es especial, es su complejidad, a lo que me referí en la primera
pregunta.
9. ¿Relacionas el ajedrez con la filosofía?
Sí, pero no sabría decir hasta qué punto es el ajedrez algo particularmente
filosófico. Lo que sí que tengo claro es que la filosofía se puede aplicar al
ajedrez y viceversa, pero probablemente, como cualquier otra faceta de la vida.
Por ejemplo, hablando de la responsabilidad, tendríamos que considerar el
ajedrez como un ejemplo de la ética de la responsabilidad. Por otra parte, el
ajedrez puede (creo) reducirse a cuestiones lógicas, al fin y al cabo, la
informática ha entrado en el mundillo y esta se basa en la lógica.
Por otra parte, y siguiendo con el tema de la informática, los mejores módulos,
hoy en día, son inteligencias artificiales, lo que implica una cierta consideración
por parte de la filosofía de la mente. Y, si como decía Fischer, el ajedrez es
encontrar la verdad, implica una cierta epistemología.
Luego, por parte de la estética, me parece que es donde hay un filón aún no
explorado desde la perspectiva filosófica, y, de hecho, estoy seguro que la
estética abordará todas las cuestiones posibles respecto a esto.
10.¿ Por qué es un deporte tan poco conocido?
No estoy de acuerdo, la retransmisión deportiva más seguida de la historia de
España fue el match entre Karpov y Kasparov en Sevilla en 1982, con trece
millones de espectadores, más que la final del mundial de futbol de Sudáfrica.
Otra cuestión muy distinta es que no sea tan seguido por la prensa deportiva, y
de hecho me parece mal que la prensa deportiva que nunca le ha prestado
atención al ajedrez, se lo preste al caso de Niemann. Pero no es algo nuevo,
normalmente la prensa deportiva, al tratar deportes no tan seguidos, los tratan
con un tono muy amarillistas que no merece ningún deporte. Ha habido casos en
los que la prensa ha cubierto una rotura de un halterófilo, una caída de un
ciclista, un accidente en automovilismo, etc.
Ahora bien, ¿por qué no es tan seguido? Podríamos decir que la sociedad del
consumo implica el “todo ahora y ya”, algo que el ajedrez no puede permitirse,
pero esto también ha repercutido en ajedrez. Hoy en día todo el mundo juega a
ritmo blitz (rápido en alemán), con tiempos iguales o inferiores a cinco minutos
por jugador.
Creo que no se sigue con tanta asiduidad porque nuestras formas de seguir los deportes han cambiado, nos vamos a revistas o periodistas
especializados, streamings que pueden cubrir una ronda de un torneo que pueden
durar más de ocho horas, y los medios convencionales no son capaces de dedicar
tantos recursos a ese seguimiento.
Esto último hace que, aunque sea accesible, sea algo de nicho. Tiene un gran
público, pero no te encuentras las noticias sobre ajedrez en un telediario, tienes
que buscarlas y encontrarlas, y la verdad es que a día de hoy hay información
más que suficiente para cualquier aficionado.
11.¿Qué impacto social puede tener?
Lo llegó a tener en la Guerra Fría. En 1972, en el match entre Fischer y Spassky,
se llegó a decir que se estuvo a punto de pulsar el botón rojo varias veces (creo
que esto es más leyenda que otra cosa).
A día de hoy, con la promoción del deporte femenino, creo que el ajedrez se está
quedando atrás, pero aun así se está avanzando, lo cual es de celebrar.
Periodistas como Leontxo García han llevado al Senado propuestas de introducir
el ajedrez como una asignatura en la educación primaria por el tema de la
responsabilidad, lo cual me parece acertado, pero no soy capaz de dar una
opinión certera sobre este asunto.
12. Y para terminar, ¿ Cual es tu jugador favorito?
Mijaíl Tal, el mago de Riga, un genio loco que fue capaz de defender el título
del campeón del mundo sólo un año. En su favor, decir que Tal hacía partidas
más bonitas que precisas, que es lo que a mí me enamoró, era capaz de
trasformar sacrificios malos en ventajas decisivas. Tenía una cita preciosa, que
era algo así como hay tres tipos de sacrificios, los buenos, los malos, y los míos.
Supongo que es una cuestión más de carisma, hay muchas historias que hinchan
su leyenda, pero cuando empecé a estudiar ajedrez, lo descubrí y me pasaba
tardes enteras viendo partidas suyas, lo cual era muy grato, porque su
sobrenombre estaba muy bien puesto.

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