
Encarnación R. J, esposa del gerente de la empresa cárnica ha declarado ante la jueza Pilar Ordóñez, encargada de la investigación del mayor brote de listeriosis producido el pasado verano en Sevilla que ha causado siete abortos, tres muertes y 217 afectados en Andalucía. Rodríguez asegura que en cuanto supo que uno de los productos había dado positivo en listeria en febrero de este año “adoptó medidas correctas” y limpiaron “con lejía” la nave y la maquinaria, según fuentes del periódico El País. Rodríguez ha sido la encargada de los protocolos de seguridad de la empresa y estuvo presente en la última inspección que el Ayuntamiento de Sevilla realizó a la fábrica en julio de 2017, pero hasta este martes no ha sido investigada.
La jueza Pilar Ordóñez también ha interrogado a Isabel Rodriguez, cuñada del propietario de Magrudis y al comercial de la empresa, Federico R.D. Ambos han declarado que ignoraban que una muestra había dado positivo en listeria.
El gerente de la empresa cárnica, José Antonio Marín Ponce, junto a su hijo Sandro José Marín Rodriguez ingresaron en presión provisional sin fianza el pasado 24 de septiembre tras el registro de las instalaciones de Magrudis ubicadas en el Polígono Industrial ‘El Pino’ en la capital Andaluza, debido a que h aja riesgo de fuga y destrucción de pruebas.
Por otro lado según fuentes del periódico ABC asegura que el equipo jurídico de Facua-Consumidores en Acción pedirá que “varios responsables municipales” del Ayuntamiento sean citados a declarar.
Esta petición radica en un comunicado que “ha puesto de manifiesto que se produjeron aún más irregularidades en las responsabilidades inspectoras del Ayuntamiento de Sevilla que las que ya había dado a conocer Facua en los últimos meses”.