El Observatorio Económico de Andalucía – IOEA – y sus indicadores, expresan que la economía andaluza experimentó un crecimiento intertrimestral del PIB con un 0,6% en este primer trimestre de 2025. Dicho crecimiento ha sido estimado para el PIB español, según el Instituto Nacional de Estadística. Con esta tasa, el crecimiento total para el primer trimestre es de un total de 3,2%, lo cual supone cuatro décimas por encima de lo previamente estudiado en el caso de España.

El porqué de este comportamiento reside en dos factores: por un lado, la evolución negativa del turismo en el inicio del año y su efecto en el PIB de la comunidad, aportando mayor peso al sector turístico en la estructura productiva regional, siendo compensada por “un buen comportamiento del empleo“.

Inflación y salarios

La inflación es uno de los tema más recurrentes y preocupantes, sin embargo, durante el primer trimestre de 2025 se ha mantenido en un posición moderada, contando con un IPC del 2,4%. Además, y lo que interesa a un mayor número de personas es que los precios de los alimentos subieron un 2%, un dato por debajo de la media nacional, lo cual es sinónimo de una ayuda para contener la inflación. No obstante, otros ámbitos se han visto afectados como es el caso de los servicios turísticos. Estos mostraron una caída de precios, en contraste con el resto de España donde aumentaron.

Los salarios es otro de los ítems con mayor importancia en la sociedad. El aumento referente a ellos que fue pactado en Andalucía resultó 2,6%, menor que el 3,35% nacional, lo cual sugiere una disminución del poder adquisitivo en la región. En referente al mercado laboral, hubo un aumento interanual del 2,9% en ocupación, aunque con un mínimo descenso del 0,4%. Otro de los apartados más comentados en la sesión matinal ha sido el sector agrícola. Este creció mientras a su vez el sector de servicios, industria y construcción perdían fuerza. El desempleo, el gran gigante de la preocupación, aumentó hasta el 2,5% de forma trimestral pero descendió un 8,3% interanual, situándose en el total de 16,1%. Por último, la afiliación a la Seguridad Social ascendió hasta el 1,6% interanual de la mano de un incremento de autónomos y trabajadores extranjeros.

Gráficos del Informe del Observatorio Económico de Andalucía

Por el lado de la demanda

Durante el primer trimestre de este año, la demanda interna se ha convertido en el principal motor de crecimiento, mientras que el sector exterior muestra un comportamiento menos dinámico. El consumo de los hogares ha experimentado una recuperación; el Comercio al por Menor sube un 3,4%, siendo además notable la matriculación de turismos, con un 19,2%. El gasto en la alimentación sube moderadamente, 2,6%, y la evolución de las ventas en grandes superficies registraron en febrero una contracción del 3,3%.

El turismo extranjero se encuentra en retroceso. El porcentaje de viajeros disminuye un 14,1% y las pernoctaciones un 13,9% durante el mes de marzo. Por último, el precio hotelera disminuye y las tarifas sufren un reajuste del -2,6% y en ingresos por habitación un -4,7%.

Inversión

Los indicadores disponibles reflejan un comportamiento con tendencia positiva durante este primer análisis de 2025. La evolución de los bienes de equipo muestra un crecimiento del 1,9% en el Índice de Producción Industrial. La obra pública dispara la licitación oficial un 119,4%. La vivienda sufre un aumento del 30% en viviendas iniciadas y un 254% en calificaciones provisionales de viviendas protegidas, reflejando el impacto de las políticas públicas de vivienda. Asimismo, las hipotecas se disparan un 23% en número y un 25,5% en importa, superando el promedio nacional sin importar los intereses.

Sector Exterior

Las exportaciones tan solo aumentan un 1,4%, mientras que las importaciones ascienden hasta el 11,1%. Además, Andalucía continúa su legado siendo especialista en productos agroalimentarios y manufacturas, pero siempre atendiendo a las importaciones energéticas. Por otro lado, la industria tiene un alto crecimiento siendo beneficiada por la mejora en cadenas de suministro globales; la construcción tiene una recuperación con gran inversión pública y un aumento de viviendas iniciadas; el sector de los servicios crece, con un desempeño favorable en TIC y las actividades profesionales, pero sin olvidar que el turismo siguen transmitiendo debilidad; el sector de la agricultura muestra la resistencia del sector primario.

Expertos del Observatorio Económico de Andalucía proyectan un crecimiento del PIB andaluz en torno al 2,5% para 2025 y del 2% para el año 2026.

Previsiones

Entre todas las previsiones existentes, las tensiones comerciales relacionadas con los aranceles de Estados Unidos generan malestar e incertidumbre. El Fondo Monetario Internacional – FMI – rebaja la previsión del crecimiento global a 2,8% desde el 3,3%. Asimismo, la recesión global se descarta pero el incremento será moderado y frágil. Por último, los estudios apuntan a la espera de la caída de los precios de las materias primas, lo cual será de utilidad para moderar la inflación.

Este análisis prevé que la economía andaluza mantenga un crecimiento en línea con el de la economía española, y del mismo modo que está sustentado en la fortaleza de la demanda interna y en sectores como la industria manufacturera y la construcción. Es por ello por lo cual el panel de expertos del Observatorio Económico de Andalucía proyecta un crecimiento del PIB andaluz en torno al 2,5% para 2025 y del 2% para el año 2026.