La Gran Final del COAC del Carnaval de Cádiz

El pasado viernes 28 de febrero se celebró la esperada final del COAC en el Gran Teatro Falla. El evento se prolongó hasta las siete de la mañana, tras la actuación de las catorce agrupaciones clasificadas y, posteriormente, el fallo del jurado.
Chirigotas: Los Calaíta conquistan la chirigota

Los Calaíta/ Foto: Román Ríos
En la categoría de chirigotas, Los Calaíta obtuvo el primer premio. Un grupo que logró ganarse tanto al público como al jurado con su propuesta desenfadada y una actuación brillante en la que imita al famoso y mítico humorista Eugenio. Dirigida por Alejandro Pérez ‘El Peluca’, la chirigota presentó un repertorio cargado de ironía y situaciones cómicas que conectaron de inmediato con el público.
El segundo lugar fue para Los Butaneros, chirigota de CAI/CDC, una agrupación que destacó por su originalidad y un tipo que recuerda a un rockero, heavy y duro, mezclando referencias clásicas con un humor muy actual. Seguidos por Los James Bond que da gloria verlos, una chirigota que jugó con el carácter paródico del personaje británico. El cuarto premio fue para Cádiz, los que van a cantar te la sudan (los disléxicos), que presentaron un formato arriesgado con juegos de palabras y recursos humorísticos metalingüísticos.
Comparsas: Las ratas, la voz del pueblo

Las Ratas/ Foto: Román Ríos
Las Ratas, dirigida por Jesús Bienvenido, se alzó con el primer premio gracias a su propuesta, con una escenografía impactante, donde un vestuario oscuro y desgastado representaba la lucha de las clases populares, y letras cargadas de crítica social, lograron conectar profundamente con el público.
La competencia estuvo muy reñida, con El cementerio, que obtuvo el segundo puesto, que apostó por una estética gótica y una instrumentación que combinaba requinto y percusión apagada para crear un ambiente sombrío. Los del otro barrio se quedaron con el tercer puesto, destacando por su armonización vocal en los estribillos. La tribu cerró la lista de premiados.
Coros: El gallinero y la revolución escénica
El Gallinero/ Foto: J. M. Reyna
El gallinero se llevó el primer premio. Su escenografía apostó por un decorado envolvente que transformó el escenario en un aviario caótico, en el que cada integrante representaba un tipo de ave con un carácter definido. La interpretación coral fue uno de los puntos fuertes de este coro, con una perfecta combinación de voces.
Les siguieron Cádiz, el show en segundo lugar, propuesta que rindió homenaje a los grandes espectáculos del carnaval gaditano. Las entrañas de Cádiz obtuvo el tercer puesto con un tipo cargado de simbolismo en el que destacó la riqueza armónica de su orquesta. El lado oscuro cerró la lista de premiados con un mensaje crítico en el que la interpretación coral jugó con cambios de tonalidad para acentuar la tensión narrativa.
Cuartetos: Ku Klux Klan Klan, irreverencia en estado puro

Ku Klux Klan Klan/ Foto: Román Ríos
Durante el formato de cuartetos, el Ku Klux Klan Klan fue el protagonista de la noche. Su humor ácida y su habilidad para improvisar en el escenario les dio el primer premio sin. El ritmo de sus intervenciones estuvo caracterizado por un juego interno de rimas que permitió que la actuación se desarrollara de forma natural, logrando la risa constante del público.
El segundo puesto fue para Un clásico nunca falla, un cuarteto que jugó con referencias a las grandes figuras del carnaval gaditano. La estructura de sus intervenciones estuvo muy bien cuidada, combinando partes dialogadas con juegos de palabras.