Riyahd Premier P1: Galán y Lebrón golpean primero
La batalla estaba servida y viendo los antecedentes del propio torneo, las parejas número 1 y número 2 llegaban en un estado de forma sensacional al último día de competición en Riyadh. La pista central iba a disfrutar del plato más fuerte que se puede degustar en la mesa del pádel, con cuatro de los seis pesos pesados que van a luchar por el trono mundial en el 20 por 10. A destacar el momento que atraviesa Alejandro Galán, que se mostró implacable durante toda la semana y lo siguió siendo en la final del sábado. Dejando de lado las habladurías de los diferentes fans e incluso hooligans que alaban a los jugadores, la final tenía un camino trazado y no se salió del mismo durante todo el encuentro: tres sets y una batalla entre bombarderos.
Lo que destacó principalmente del encuentro y de ese camino que teníamos todos en la cabeza es un factor que nunca desaparece: el psicológico. La fuerza inamovible con la que Coello y Tapia comenzaron el primer set, sin dejar opción alguna de rotura a sus adversarios, con un juego vertiginoso y un Arturo implacable en la red, comenzó a diluirse tras el 7-6 inicial que estos consiguieron. Lebrón y Galán despertaron y, con la experiencia que no poseen sus rivales, levantaron un partido tremendamente complicado. El contexto invita a pensar que si los españoles siguen por estos derroteros, poco tienen que hacer los demás contendientes al 1, aunque para decir esto hay que ser muy atrevido y por aquí propongo ser cautos.
El partido transcurrió con los moldes propios de quienes están arriba en el ranking. Inconmensurables en el servicio, ambas parejas llegaron al final del segundo episodio de la final con todo por determinar aunque con la presión en el banquillo de Lebrón y Galán, que rompían en dicho tramo crucial para empatar la contienda. A partir de ahí y con ambas parejas sin margen de error, el factor psicológico que antes describíamos llevó a la dupla española a romper para ponerse 1-3 y encarar el tramo final entre amenazas de Tapia y Coello que no se llegaron a concretar. Ahí quedó el partido. Lebrón y Galán, campeones del Riyadh P1 que abre la temporada.
Otro de los factores que destacar del paso de Lebrón y Galán por este primer P1 del año, es la renovada (otra vez) versión de Juan Lebrón. Tras aparecer a finales de la temporada pasada con un juego más técnico, pausado desde el fondo de la puesta y más de construir que de arrasar, ahora, además de este juego que sigue desplegando, el de El Puerto de Santa María se ha reencontrado con su pegada, algo con lo que seguro estará francamente contento. A falta de afinarla un poco más, se le nota suelto por unas lindes en las que siempre fue referente, con el recuerdo de aquel 2020, 2021 y 2022 en los que no se le podía tirar un globo. Atención a esto porque si ya fueron demoledores en el tramo final de 2023, si se le añade este factor al juego de la pareja, podríamos estar ante la mejor versión posible de Galán y Lebrón.
Amante empedernido del periodismo, me encuentro en una fase de apasionante aprendizaje en la universidad. En cuanto a gustos, la tauromaquia, el mundo del motor y las cofradías son mis favoritos.
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