Ya es Navidad. No lo digo yo, lo dicen los miles de escaparates que desde el 1 de noviembre ya están adornados y anunciando esta festividad. Parece que no se puede perder el tiempo para incitarte a comprar productos. Sin dejar atrás la instalación del alumbrado navideño que cuelga de las principales calles de Sevilla desde esa misma fecha.
No quiero ser el grinch de la Navidad, pero ese alumbrado, que en algunas ocasiones hace parecer a los edificios principales un lugar de lucecitas, le ha costado al Ayuntamiento 1,2 millones de euros, un incremento del 17% respecto al año anterior que sale de las arcas públicas. ¿Alguien nos ha preguntado si queremos invertir nuestro dinero en este alumbrado que no sirve absolutamente para nada? Bueno, no nos sirve a nosotros, a las principales tiendas de la zona donde se encuentra ubicado les viene de lujo. Son parte del capitalismo. Incitan a la sociedad a consumir, esa es su misión.
“Me parece muy bien que se invierta ese dinero porque eso da trabajo y viene mucha gente a verlo. Eso genera un ingreso económico para las empresas que lo han pasado muy mal”, ha comentado Pilar Fernández, malagueña de paso por Sevilla, a EUSA NEWS.
Desde la invasión rusa a Ucrania, los precios de los combustibles no han parado de subir y el Gobierno de España ha tenido que tomar cartas sobre el asunto para frenarlo. Un total de diez decretos ley han sido aprobados desde que en el verano de 2021 los precios de la energía emprendieron su carrera alcista. Ahora, con la llegada de la Navidad parece que la crisis energética y económica han sido aparcadas para inundar las calles de luces e “ilusión”.
“Van a acabar con todos nosotros. Nos fríen a impuestos y se gastan el dinero en esto. Vale que sea un reclamo pero en plena crisis energética que se gasten ese pastizal… Luego a nosotros nos obligan a cumplir el decreto energético con la excusa de ahorrar”, explica cabreada la empresaria María del Mar Delgado.
Desde el 9 de noviembre, cuando las personas en Europa buscan en Google términos como ‘crisis energética europea’ y ‘precio de la energía’ aparecen consejos e información de la Agencia Internacional de la Energía (IEA). Parece ser que el gobierno municipal los ha leído y ha decidido retrasar el alumbrado navideño al 5 de diciembre, reducirlo una hora en días laborables y adoptar una tecnología LED aún más eficiente para conseguir un ahorro del 30 % y hacer frente así a la crisis energética pero, ¿es suficiente?
“Es un ejercicio de responsabilidad y damos ejemplo, al tiempo que se compatibiliza con el necesario impulso a los negocios y al empleo en la campaña navideña”, han explicado los delegados Juan Manuel Flores y Francisco Páez pertenecientes a la Gerencia de Urbanismo y Medio Ambiente y la Delegación de Economía, Comercio y Turismo.
“Me parece una brutalidad. Creo que hay otras necesidades más importantes en la actualidad como para invertir en lucecitas. No creo que hagan falta las luces de navidad para saber que estamos en estas fechas”, ha asegurado Alejandro Díaz, estudiante de la Universidad de Sevilla.
Recordemos que, el año pasado, el Ayuntamiento de Sevilla decidió ampliar el número de travesías con el alumbrado navideño. Un total de 288 calles y plazas de todos los distritos municipales de la ciudad que volverán a ser decoradas. Qué bien, ¿no? Claro, es mejor gastar una millonada en alumbrado que reducirlo para invertir ese dinero en otros sectores más útiles y necesarios. Perdón, se me olvidaba que si no hay cientos de miles de luces parpadeantes y de colores que desprenden felicidad e ilusión en cada calle no es Navidad. Ya se nos ha olvidado eso de la crisis energética y los efectos que está teniendo en nuestra economía.
“A nosotros nos piden que ahorremos y ellos mira lo que hacen, derrochar”, explica Estefanía Cruz, sevillana de nacimiento. Una opinión a la que se le une su amiga Ester Ramos. “Si ellos mismos no se ponen de ejemplo, ¿cómo quieren que la gente lo haga?”, reprocha.
¿Por qué no ponemos más y más luces para tapar todos los problemas que estamos sufriendo y hacer como si nada de eso estuviese pasando? Tenemos una sanidad de atención primaria precaria, la subida de los precios de productos, el gran coste de la energía… Un largo etcétera que parece que decidimos olvidar por estas fechas para que luego en enero, tras finalizar esta festividad, vuelva a resurgir. Sin lugar a dudas, el alumbrado navideño es una inversión de dinero innecesaria que se podría destinar a otros sectores y servicios de mayor importancia que realmente necesite la ciudadanía y más en la situación en la que nos encontramos.
Periodista. Actualmente escribo para EUSA NEWS y Comentamos TV, además de ser su Community Manager. Anteriormente en 7TV como redactor en deportes y en Enter Seguros como redactor SEO.