El interventor del Alvia se justifica y explica que no sabía donde estaba

El testigo ha explicado que no negó la llamada a la Policía, si no que "su mente la borró" debido al shock que sufrió
0
524
El interventor justifica la llamada que supuestamente desubicó al maquinista en la quinta jornada del juicio. FOTO: QUINCEMIL

Comparte la noticia

Con media hora de retraso ha comenzado este miércoles, 26 de octubre, la quinta sesión del juicio por el accidente del tren Alvia en Santiago de Compostela.

En la jornada de hoy han declarado cuatro testigos, entre los que destaca el interventor, Antonio Martín Marugán, cuya declaración era la más importante debido a que fue quien ejecutó la llamada que supuestamente desubicó al conductor.

A preguntas de la Fiscalía sobre la llamada, Marugán ha explicado que la realizó debido a que, aunque no sabía en qué punto se encontraba, suponía que estaban cerca de la estación de Santiago donde no podría hablar porque “iba a tener mucho más trabajo” y que, en el trayecto hacia A Coruña solía haber muy mala cobertura.

También ha declarado que Renfe no les da instrucciones de cuándo hacer las llamadas siempre que sean de servicio. El testigo ha explicado que realizó la comunicación en ese momento ya que “no tenía nada que hacer”, insistiendo en que “no sabía en qué punto kilométrico se encontraba” el convoy. 

En respuesta a la declaración del Policía Nacional en la última sesión, el interventor ha expuesto que no negó la llamada, que simplemente “su mente borró eso” por el shock que le provocó lo sucedido.

Antonio Martín Marugán ha asegurado que según su conocimiento “no había nada que impidiese hablar con el maquinista” y que queda en manos de éste la decisión de atender o no la llamada, declarando que no conoce a ningún maquinista que se le haya sancionado por no poder atenderla.

Aunque reconoce que la llamada “no era urgente”, el interventor ha afirmado que él se encarga de controlar lo que ocurre dentro del tren, incluyendo ayudar a los clientes, y no de la circulación del mismo, por lo que desconoce el riesgo de la zona en la que efectuó la comunicación. 

Tras el interrogatorio de este primer testigo, ha comenzado el del vigilante de seguridad del tren accidentado, Celso Cástor González. En su declaración ha asegurado que notó que la velocidad antes de entrar en la curva no era la de siempre y afirma que “iba muy deprisa”.

Con respecto a la llamada, el vigilante ha declarado que el interventor podría “haber esperado a Santiago o a Coruña, que iba a ver al maquinista”, insinuando que no era un buen momento para ejecutarla ya que sabían “que quedaba poco para llegar a Santiago” al haber pasado el viaducto del Ulla.

Cástor también ha expuesto que además de que conocía cómo es la curva de Angrois, había escuchado a los maquinistas hablando entre ellos de los problemas de la zona.

El tercer testigo de la jornada de hoy es un mecánico de Renfe que viajaba en el mismo vagón en el que se encontraba el interventor. La declaración de este empleado de Renfe no ha sido muy explicativa, quedando únicamente claro que presenció la comunicación de Marugán con el maquinista y que cree recordar que se produjo el aviso de llegada a la estación compostelana en ese mismo momento porque los viajeros ya estaban bajando las maletas.

La última declaración del día ha sido la de Javier Illanes, el maquinista que condujo el tren Alvia desde Medina del Campo hasta Ourense, donde fue relevado por Garzón. Este testigo ha declarado que durante su formación no había recibido ninguna recomendación de dónde comenzar a frenar en la zona del accidente y asegura que no existía ninguna señal de frenado antes de llegar a la estación.

Con respecto al teléfono corporativo, el cual, según declaró el acusado, tenía la obligación de responder siempre, ha explicado que no había recibido ninguna formación ni instrucciones sobre el uso del mismo. 

Durante su declaración, Illanes ha afirmado con rotundidad que “la línea no era cien por cien segura” y explica que es posible que su compañero pudiese desubicarse con la llamada del interventor. Además, en su opinión, ha expuesto que la causa del accidente que dejó 80 muertos y 145 personas heridas fue la falta de señalización de la línea

Este juicio sin precedentes está previsto que finalice el 10 de febrero de 2023 con la participación de 522 testigos, 21 testigos/peritos y 126 peritos en la causa.



Comparte la noticia

Comments are closed.