Ganan pero no convencen
El Real Madrid firmó una victoria contundente en el día de ayer por 3-0 ante el Eibar, en un Santiago Bernabéu que tanto se le está atragantando esta temporada. Los blancos firmaron su cuarta victoria consecutiva en liga, en un partido apático por ambas partes y que solo salvó los destellos de calidad de Isco y la buena jugada en el tercer gol de Marcelo. La titularidad de Ceballos, en un centro del campo diseñado con buen gusto (Casemiro, Ceballos, Isco y Modric), fue una de las sorpresas horas antes del partido junto a la suplencia de Benzema y Kroos.
El partido comenzó con el mismo tono de relajación con el que terminó, con un Madrid que apenas creaba peligro y un Eibar que no le quiso poner las cosas difíciles. Un buen centro de Asensio desde la banda derecha fue suficiente para que Oliveira encajara el primer gol en propia puerta en el minuto 18. Diez minutos más tarde, y con un Eibar que no despertaba, Asensio hacía el segundo tras un buen balón de Isco al pico del área, que el mallorquín consigue enganchar a bote pronto para fusilar a Dmitrovic.
La segunda parte comenzaba con mejor ritmo por parte de los madridistas, con buenas conexiones entre Isco y Asensio. Y con un Cristiano que tuvo sus oportunidades pero que no consiguió superar al guardameta serbio. El portugués que anduvo más solitario en la delantera con la ausencia de Benzema no tuvo uno de sus mejores días en la noche de ayer. Zidane quiso tomar cartas en el asunto dando entrada al nueve blanco y volviendo a experimentar, una vez más, en la banda izquierda con Theo y Marcelo. Sería entonces cuando llegaba el tercer tanto para los blancos, tras una jugada exquisita por banda izquierda protagonizada por Theo y la magnífica conexión entre los incorporados Benzema y Marcelo, que finalizó el brasileño con un fuerte disparo al palo largo del portero.